Uno de los nombres que en España se puede relacionar sin ningún género de dudas con la promoción de ideas descabelladas en salud es Josep Pàmies. Este agricultor catalán lleva años divulgando barbaridades, conspiranoias y supuestos consejos de salud sin importarle la gravedad de la enfermedad a la que refiere sus peroratas. Y sin ser profesional de la salud. Como forma de lograr adeptos usa la falacia naturalista en forma de plantas supuestamente medicinales o alimentos ecológicos (que son parte de su negocio) También utiliza un discurso populista y «antisistema» como falso argumento y como «anzuelo». Sin embargo, las contradicciones son tónica habitual de su discurso, igual que la ausencia de evidencias que apoyen sus afirmaciones y con un mínimo de análisis le deja en evidencia.
Graves acusaciones del sr. Pàmies basadas, como siempre, en nada.
Si carece de sentido, Pàmies lo divulgará
Un ejemplo es su negacionismo del VIH (causa del SIDA) y su recomendación del tóxico y peligroso MMS para curarlo. Reniega de los antibióticos (como los usados para tratar al niño enfermo de difteria en Olot) pero califica al MMS de «poderoso antibiótico». Por no hablar de que el MMS natural no es: no crece en los árboles precisamente. En un repaso a lo publicado en su blog lo encontramos recomendando Triodos Bank (banco que financia pseudociencias), la Kalanchoe daigremontiana como cura del cáncer, el antivacunismo contra el VPH o el uso ilegal de la stevia rebaudiana. Se hace eco de una conspiranoia absurda sobre que la leche que consumimos causa cáncer.
Antivacunas y anti-antibióticos… Pàmies lo tiene todo.
Aboga por el consumo «curativo» de agua de mar, se cree y apoya el timo de la «cirugía psíquica», también que la soja causa infertilidad o recomienda consumir marihuana directamente para la esclerosis múltiple. Niega que el sol sea causa del melanoma: según él son las cremas antisolares y la alimentación industrial. Por eso usa su propia orina para protegerse del sol. Apoya y promueve dejar los tratamientos de quimioterapia y paliativos en casos terminales por tratamientos «naturales». Es «antitransgénicos», echa la culpa de diarreas a aditivos autorizados (quimifobia), da causas para el autismo como las vacunas, los microondas, los aditivos alimentarios…
Josep Pàmies y Txumari Alfaro.
Seguir leyendo →