Desde antaño la curiosidad humana ha estado ligada al misterio en cuestiones que no era sido capaz de resolver. La inquietud por enigmas y misterios se podía tornar en miedo a lo desconocido, temor a que se trasladase a su propia persona o a vivir situaciones fuera de su control que le generasen pánico. Muchos de los mitos y leyendas también se convirtieron en misteriosas cuestiones insondables al darles algún crédito .
El talento y la transmisión de información convirtieron muchos de estos enigmas en cuentos alrededor de un fuego. Con la aparición de la escritura se empezaron a conservar, y con la imprenta muchos más tenían acceso a relatos que les provocaban miedo, creando un género literario: el de terror. Gustavo A. Bécquer, Mary Shelley, Edgar Allan Poe, H.G. Wells, H.P. Lovecraft, Bram Stoker, Clive Barker, Stephen King… y muchos otros han inquietado a sus lectores con sus obras. Pero todos sabemos que, aunque se basen en algún misterio o leyenda con alguna traza de realidad, no dejan de ser literatura de ficción.
El misterio en España
La atracción por el misterio y el terror sigue existiendo más allá de taquillazos como «Saw», «Destino final» o «Pesadilla en Elm Street». En España se publicó a partir de 1952 un célebre diario (luego semanario hasta su desaparición en 1997) llamado «El Caso». Recogía noticias truculentas, crímenes, misterios de supuestos «milagros»…
Ya encarando el final del Siglo XX encontramos figuras como la de Fernando Jiménez del Oso (psiquiatra, 1941-2005) que adaptaron este género a la televisión. Primero fue guionista de varios capítulos de la mítica «Historias para no dormir».
Más tarde tuvo una sección en un programa dominical para hablar de «misterio» y no tardó en tener programa propio: «Más allá» (1976-82, durante dos temporadas se llamó «La puerta del misterio»). En el recuerdo la emisión del documental «Alternativa 3» dándolo como cierto cuando había sido una broma realizada para emitir el «April Fool’s Day» en una televisión británica.
Sobre las mismas fechas cobraba popularidad el periodista Juan José «J.J.» Benítez. Especializado en analizar sucesos de objetos voladores no identificados (OVNI) y autor de la saga de novelas best seller «Caballo de Troya» sus escritos o investigaciones de metodología y dejan resultados muy cuestionables (o directamente falsos).
Célebre es el falso metraje que produjo y mostró en televisión sobre la supuesta «verdadera» llegada a la Luna. Para él «un científico es una persona que busca la verdad. Y la busco. Por tanto, soy científico.»
Misterio en los medios
Revistas y programas de radio también son altavoz de estos supuestos misterios, desde «Más allá de la ciencia» a «Año cero» (que sufren problemas económicos como el resto de publicaciones en papel), o «Espacio en blanco» y secciones en «La Rosa de los Vientos».
La figura del investigador/periodista de sucesos extraños ha entrado a formar parte de lo cotidiano y desde ciertos sectores se le da crédito (incluso periodístico). Incluso medios de comunicación públicos sostienen y emiten algunos de estos programas.
En la Región de Murcia la televisión autonómica 7TV emite «Zona Cero» como programa de «entretenimiento» (aunque «a la carta» figura como «divulgativo»). Entre sus temas, «El fantasma del Palacio Guevara» y «Abducción extraterrestre en Jumilla». En Onda Regional de Murcia (la emisora pública) pervive desde hace años «El último peldaño» que se define como «divulgación de lo que se puede denominar Ciencia de Frontera; es decir: la parapsicología y temas afines, además de todas aquellas materias que están en los límites de la ciencia conocida.» Alguno de los temas que ha tradado: ¿Maldición de los años bisiestos, manifestaciones paranormales en animales, psicofonías?
En el programa diario «La noche más hermosa» de Canal Sur Radio estos «misterios»son habituales, y también las pseudociencias. Solo hay que echar un vistazo a su cuenta de Twitter para comprender a qué nivel de irracionalidad llega este espacio y su contradicción con el «servicio público»:
En el apartado de Objetos Malditos hablamos de la Lanza del Destino. La lanza que, en teoria, atravesó el costado… https://t.co/qdxb1VyrwN
— LA NOCHE MÁS HERMOSA (@LANOCHERMOSA) January 18, 2016
La Corporación Radio e Televisión de Galicia (CRTVG) mantiene el espacio radiofónico diario «Milenio». En 2012 TeleMadrid emitió «Rastreadores de misterios», que incluyó la (humorística) farsa de ‘Ummo’. La emisora pública de Castilla-La Mancha fichó a golpe de talonario para emitir «Camino del misterio». En Radio Nacional de España, Espacio en Blanco se jacta de haber tenido en su programa a personas de la «entidad» de la «médium» Marilyn Rossner.
Todos estos espacios contribuyen con su parte a aumentar el agujero de deuda que supone el modelo actual de medios públicos y además no contribuyen a la sociedad, sino a fomentar la irracionalidad y el pensamiento mágico.
Menos misterio, Caperucita
Pero, ¿realmente es todo lo que publican estos medios tan misterioso? Veamos algunos ejemplos:
- Según «Año Cero» un científico ruso fotografió el alma saliendo del cuerpo al morir una persona. Lo realizó, al parecer, con la clásica cámara Kirlian (aunque las imágenes que acompañan el artículo son termografías) que simplemente obtiene una imagen del campo electromagnético de un cuerpo, pudiéndose apreciar el efecto corona. Es decir, la noticia es falsa y solo busca alimentar a quien tenga creencia en que existe el alma.
- También en «Año Cero» encontramos titulares recientes como «Desconcierto ante las misteriosas arañas gigantes que emergen del océano». La noticia, que es real (arañas de 25 cm. de tamaño), es de 2008 y no tiene nada de misteriosa: sabemos que no conocemos aún todas las especies existentes en nuestro planeta, en especial porque muchas están en lugares donde el acceso para el hombre es muy complicado. Selvas, grandes profundidades submarinas, glaciares, etc. esconden aún sorpresas para los biólogos que nos permitirán saber más de la evolución de la vida en la Tierra. Desconcierto sería encontrar una nueva especie donde ya se ha buscado a fondo (o aparejar todos los calcetines de un lavado a la primera).
"Hay criaturas no humanas que controlan el mundo", ex ejecutiva del Banco Mundial –> https://t.co/7xo5grFQSs pic.twitter.com/USu5KCFXt3
— AÑO/CERO (@revistaANOCERO) January 14, 2016
- En el número de octubre de 2015 de «Más allá» encontramos supuestos objetos en la superficie marciana (una esfera levitando, una criatura, el símbolo del dios sol…) ¿Simplemente pareidolias? se pregunta la revista. Sí, simplemente.
- ¿Se acerca la Sexta Extinción? Apuntan a que será por otra edad de hielo, o un gran terremoto. Se acerca, seguro, pero hablando en términos de tiempo cósmico falta una eternidad, claro. Para causar alarmismo en «Más allá» obvian las escalas temporales y añaden el supuesto Planeta X «Niburu» como otro posible causante. Tampoco hay misterio aquí, como tampoco lo es que nuestra estrella más cercana (el Sol) un día (dentro de millones de años) se extinguirá también.
- No faltan en este número voces de ultratumba en la fortaleza de «La Mola», un barco fantasma en Canarias, etc. Como novedades bibliográficas citan «Cocina para sanar las emociones», «Superalimentos» y «Guía completa de amuletos y talismanes». La «agenda de ocio y servicios» incluye videntes y tarotistas. Sin olvidarnos de que la tragedia de Los Andes, fruto de un «accidente kharmico» (cuando fue un accidente aéreo que hasta tiene película). Misterios manufacturados.
- En «Espacio en blanco» de RNE encontramos profecías sobre los EE.UU. (jamás se ha demostrado que alguien haya adivinado nada, como atestigua que el millón de Dólares de la James Randi Educational Foundation nunca se concedió), supersticiones varias (ouija, casas encantadas, poltergeist, etc.), promociones de libros sin base evidencial rigurosa, duendes y elfos, o chorradas como pianos de cola como esta.
- Tampoco hay tanto misterio en las rutas por las pirámides (como pretende hacer ver «Espacio en Blanco»). Por su estructura constructiva aún guardan secretos que con nuevas tecnologías se irán averiguando ya que lo principal es proteger su estado de conservación que ya está bastante dañado por el expolio sin control (al que, por cierto, incitan en otros programas)
Las mascotas dan mensajes, pero mensajes desde el Más Allá. Sorprendentes casos de Miguel Pedrero y Carlos G. Fdez. pic.twitter.com/F6oPjIKK0s
— Espacio en blanco (@eblancoradio) December 20, 2015
@qmph_es @waltzing_piglet Echo de menos a Antonio José Alés, que desde la SER arrasó con misterios y alertas OVNI https://t.co/W8JdezPaWw
— Centinel (@centinel5051) enero 21, 2016
Ministros del «misterio»
Sin duda, a día de hoy el programa estrella de este «género» en España es «Cuarto Milenio». Emitido en Cuatro desde noviembre de 2005 lleva 11 temporadas en antena, con 437 programas emitidos y varios especiales. Su audiencia es bastante fiel: tras su arranque logró su mejor temporada en 2007-08 en cuanto a share (13,2% y 897208 espectadores de media).
Después sufrió una caída del número de espectadores (hasta caer por debajo de 600.000). Tras cambiar de productora, en las 3 últimas temporadas ha recuperado audiencia, aunque por los cambios de consumo televisivo su share ronda el 9% (mejor en el target comercial) y consigue cerca del millón de espectadores de media.
El programa dirigido y presentado por Íker Jiménez (secundado por su esposa Carmen Porter) cuenta entre sus guionistas con Santiago Camacho (experto en teorías conspiratorias), Pablo Villarrubia (también de la «escuela» Jiménez del Oso) o Ignacio Ares (experto en Egipto y sus mitos). Aquí otro de sus redactores echando balones fuera sobre su «especial» sobre «El Principito»:
@qmph_es @jntgnrc Documéntate y luego hablamos. Prejuzgar no es científico.
— Javier Pérez Campos (@JaviPerezCampos) enero 3, 2016
Suelen estar presentes en plató D. Enrique de Vicente (cofundador junto al escritor Javier Sierra de la revista «Año Cero»). Este señor es capaz de decir cosas así. El propio Javier Sierra también ha participado numerosas ocasiones en el programa. Paloma Navarrete es «vidente» y contribuye en exploraciones de lugares «encantados» junto al «Grupo Hepta» al que pertenece. Como contrapunto suele estar el sr. Jose Manuel Nieves (Ciencia en ABC) que no termina de ser contundente pese a tener argumentos de sobra a favor de la ciencia.
Otro de sus invitados recurrentes es el Dóctor José Cabrera (psiquiatra forense), capaz de hacer una «autopsia» al supuesto cuerpo de Jesús de Nazaret, o de afirmar sobre el caso de Diego (el niño de 11 años que se suicidó por el acoso que recibía en su colegio) que es «una chorrada» ya que «Toda la vida ha habido peleas en los colegios; ¡eso no es acoso!».
Según los temas tratados en cada programa acuden algunos invitados más. JM Mulet fue uno de ellos en un programa donde se habló sobre transgénicos (él mismo cuenta la experiencia). Recientemente «Cuarto Milenio» organizó un debate muy sesgado sobre el «reiki», donde tan solo el invitado (Vicente Baos) tenía una postura racional (el sr. Nieves siguió con su ‘ni sí ni no’), con lo que la audiencia no tuvo información equilibrada (ni siquiera mal equidistante) sobre esta práctica sin fundamento ni utilidad médica.
Ambigüedad y sesgo
Una de las constantes de «Cuarto Milenio» es la supuesta imparcialidad del programa que, sin embargo, usa la ambigüedad para seducir al espectador desde una información siempre sesgada en favor de la teoría más inverosímil y misteriosa para alimentar más la curiosidad («¿Quiénes son los amos del mundo?», «La llegada del hombre a la Luna, a debate», «Ouija, ¿puerta al más allá?»). Desde «psicofonías» a péndulos en movimiento, cualquier técnica sin rigor descartada por la ciencia se convierte en este espacio en parte de los datos a evaluar por el espectador.
Como ejemplo casi humorístico está el especial con la «respuesta definitiva» sobre «las caras de Bélmez» (programas 375 y 376), donde se toma una muestra de una baldosa. Solo una, no de otras baldosas, tampoco varias de la misma. El resultado concluye que no hay pintura… ¿y? Si fuese pintura no haría falta un análisis y a simple vista se notaría por tener una textura diferente, bordes, etc.
En ningún momento se habla del desgaste sufrido por ese suelo durante el paso de los años y el paso de tantos y tantos curiosos e investigadores (o de un posible desgaste intencionado). Una baldosa no es un corte de helado: al pulirla cambia porque al retirar material que no es homogéneo en su formación aparece su continuación imperfecta. Si además es antigua no tiene los avances tecnológicos que hacen más resistentes y vistosos ciertos materiales (como el vitrificado). El efecto de las pareidolias hace el resto. Lo cuenta mejor Javier Cavanilles (coautor de «Los caras de Bélmez») aquí.
Otro argumento habitual hasta decir basta en el programa es el falaz «ad ignorantiam». Como siempre, si no sabemos una cosa ya se averiguará, o no. En lugar de especular o abrazar una hipótesis irracional debemos ser suficientemente humildes como para reconocer nuestro desconocimiento. El resto de falacias también aparecen en un momento u otro, empezando por dar por ciertas premisas que no están probadas y construir desde ahí «casos».
En cuanto a la temática aparecida durante estas temporadas destacan (en base al título de cada programa que aparece en su versión online «a la carta») hay cuatro líneas principales en el programa. Supuestas apariciones fantasmagóricas y lugares que inquietan, episodios truculentos de crímenes y supuestas maldiciones, exaltación del fervor religioso y las creencias (como las profecías o las brujas), y extraterrestres/OVNIs y otras conspiranoias. 2 de cada 3 programas tienen estos como temas centrales.
A cierta distancia estarían la arqueología sui generis y la pseudocientífica «criptozoología», además de la exageración de hechos comprobados por la biología y la ciencia. Unas dosis de leyendas sobre nazis, algo de pseudociencias como la acupuntura… y nada más.
Y nada más porque el tema principal de 1 de cada 7 programas es puro «misterio» prefabricado y artificial. Un ejemplo reciente fue el «especial» dedicado a elucubrar sobre el accidente aéreo que costó la vida al inolvidable Félix Rodríguez de la Fuente. También es constante la repetición de temas hasta la saciedad pese a que en la era de la tecnología y la ciencia esos «misterios» no dan para más.
Unos títulos de programas para que se hagan una mejor idea de lo que comentamos:
«Fantasmas fotografiados, ¿verdad o mentira?», «Delatados por el más allá», «¿Existen los fantasmas?», «¿Fotos del más allá?»,»El misterio de los aparatos que vigilan bebés y muestran fantasmas», «El encuentro paranormal de los hermanos Estopa», «Maldiciones de Hollywood», «Kennedy: Estirpe Maldita», «El asesinato de Marilyn Monroe», «Los éxtasis de Santa Teresa», «El exorcismo de Annaliesse Michel».
«El hombre del Saco», «El niño compadrito», «Vampiros, hijos de la noche», «Las marcas del maligno», «Endemoniados hoy», «El exorcista: La conexión española», «2012», «Profecías de Parravicini», «Sueños: payasos», «Medusa inmortal», «Memoria celular: La huella del otro», «El enigma del cirujano poseído Zé Arigó», «El misterio de las rocas errantes», «Arqueología Psíquica».
«Santorini: la isla de la Atlántida», «¿La Atlántida en España?», «El Hombre Pez de Liérganes», «El casco de Dios», «Conciencia cósmica», «Burgos: Operación OVNI», «Alien Cats», «Misterios bajo el asfalto de Almería», «Doñana: el último paraíso del misterio», «Los misterios de Altamira», «¿Qué son las abducciones?», «Ranking de asesinos», «El MH370 de Air Malaysia», «Los Rodeos, sombras en la niebla», «La verdadera finalidad de los chemtrails en el cielo» o (qué casualidad) «La sexta extinción».
En 2005 @navedelmisterio se estrenó con tarotista y el falso misterio de Ochate. @cescept https://t.co/Gmsi9bNQEf pic.twitter.com/dGNGDAUL3S
— Luis Alfonso Gámez (@lagamez) enero 20, 2016
¿Que siga el «misterio»?
Sí, los relatos de misterio deben seguir, pero advirtiendo con claridad a lectores, oyentes y espectadores de las carencias, subjetividad y/o «montaje» de la información que se va a presentar y que de dicha información en ningún caso puede extraerse una conclusión razonable. Es decir: que adviertan que no son un programa de divulgación, sino uno de entretenimiento. Despertar la imaginación es muy importante, sembrar hipótesis irracionales sobre temas muy claros o nada claros no es correcto.
Eso sí, mientras tanto tampoco es correcto que cuando se deja alguna de sus afirmaciones en evidencia se recurra a faltar el respeto a programas de divulgación científica que fomentan el pensamiento crítico…
@cescept @AcevAsociacion @elnocturno jajajjaja ya no sabéis que hacer!!! Seguid haciendo Orbitas Laicas que os va muy bien!!!
— Carmen Porter (@carmenporter_) enero 19, 2016
Mucha más información y desmontaje de «vendedores de misterio» en Magonia, del gran Luis Alfonso Gámez.
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