 El pasado 13 de enero de 2014 ponía en marcha el proyecto «¿Qué mal puede hacer?». La intención primordial es (y seguirá siendo) poner a disposición pública del modo más objetivo y riguroso posible información veraz sobre los daños que pueden causar pseudociencias, supersticiones, superchería, falsedades, timos y similares sobre la salud, ya sea por su efecto directo o indirecto por sustitución de aquellas terapias, cirugías o medicamentos de eficacia probada por una herramienta muy valiosa para el conocimiento que es la Ciencia, capaz de llevarnos a lugares insospechados hace solo unas décadas o prolongar nuestra esperanza de vida y que esta sea de una mayor calidad.
El pasado 13 de enero de 2014 ponía en marcha el proyecto «¿Qué mal puede hacer?». La intención primordial es (y seguirá siendo) poner a disposición pública del modo más objetivo y riguroso posible información veraz sobre los daños que pueden causar pseudociencias, supersticiones, superchería, falsedades, timos y similares sobre la salud, ya sea por su efecto directo o indirecto por sustitución de aquellas terapias, cirugías o medicamentos de eficacia probada por una herramienta muy valiosa para el conocimiento que es la Ciencia, capaz de llevarnos a lugares insospechados hace solo unas décadas o prolongar nuestra esperanza de vida y que esta sea de una mayor calidad.
No dejaremos de agradeceros vuestro seguimiento, que confío sea crítico: no «creais» a piés juntillas todo lo que aparece en la web o el blog, cuestionarlo y reflexionar sobre ello, ya que nadie puede apropiarse de las verdades de los demás. No dejeis que nadie lo haga de las vuestras. Nunca.





