En este segundo «enfrentamiento» pseudocientífico los contrincantes tienen un mismo argumento principal, aunque cada uno lo usa… «a su manera»:
Conspiranoia ondas vs magnetoterapia
Y es que lo que para una produce sanación, para la otra daña: las ondas electromagnéticas. Como ya comentamos en el correspondiente artículo sobre el delirio paranoide de la irracional aversión a las ondas que producen móviles, WiFi o las emisiones de televisión (http://quemalpuedehacer.es/dk/doku.php?id=wiki:miedos-conspiraciones:ondas-radio), las ondas electromagnéticas del rango de frecuencias de estos dispositivos son no ionizantes, y salvo un aumento de temperatura a corta distancia y gran potencia de las mismas son incapaces de alterar la estructura del ADN.