Situamos primero la acción de esta opereta que si bien incluye una parte real, contiene los disparatados elementos necesarios y actuaciones notables que la incluyen en este género.
Viernes 3 de octubre de 2014. Plató del programa «T con T» de La 1 de RTVE. Hace unos minutos se anunció mediante una «promo» que durante la emisión de hoy se incluirá un apartado en relación a la celebración del trigésimo cuarto «Foro Internacional de las Ciencias Ocultas y Espirituales» en Madrid. «El negocio del esoterismo pasa por un momento de esplendor. Se calcula que mueve tres mil millones de euros al año en España.«
«Quedar expuestas»
Acto I: Presentación
Así, tras la intervención y el humor de «Los Morancos» (a partir de 1h26m59s en el vídeo), Toñi Moreno comenzó a introducir este tema. La reportera Inés Romera (en directo desde el «Foro») cifra el negocio esotérico en España en más de 3.000 millones de Euros «anueales» (solo el tarot telefónico 2.000M€), dando ¿trabajo? a más de 100.000 personas.
La entrada al foro son 5€ y pueden acudir unas 15.000 personas (atentos en ese momento a la «voz del más allá», un micrófono abierto, diciendo «buenas tardes, si, qué guapa te han puesto»), es decir, 75.000€ solo en entradas. En esas que la reportera afirma que unos objetos que quitan las radiaciones valen sobre 35 euros. También da precio para la «fotografía del aura». Deja pendientes más detalles para una futura conexión (que no llegó a realizarse por el cariz del debate)
Entra en escena la primera de las dos «actrices» principales de esta figurada «opereta»: Victoria Braojos. Afirma que ve y habla a difuntos. Y tiene una cadena con seis tiendas de productos «esotéricos», y ha hecho videncia televisiva. Afirma que le ha afectado la crisis… pero ahí sigue, firme, vendiendo artefactos. Pese a ser de Tomelloso, es conocida por «la pitonisa de Alcorcón» por una casualidad. Es decir: conoce el medio televisivo.
La segunda de las protagonistas es Montserrat Gascón: afirma que se ha curado de dos cánceres con sus propias manos. No se comenta en antena que es ¿especialista? en ¿¿¿liberación del pericardio???, y que representa en España a la ¡¡¡osteopatía bioenergética celular (OBC)!!! Eso no es todo: pese a que parece que la señora Gascón ha utilizado la opción de Google para ocultar información, mucha atención a lo que aparece rascando un poco más: las «células de la abundancia». Sin comentarios.
A esta selección de invitadas «esotéricas» (la selección en estos casos da igual) el programa «T con T» enfrentó a varios periodistas con un enfoque escéptico: José Manuel Nieves (ABC, Ciencia), Raquel Fernández (periodista del programa, atentos a su guiño a Toñi Moreno) y Luis Balcarce (de Periodista Digital y colaborador del programa)
«Quedar expuestas»
Acto II: Nudo
La sra. Gascón (61 años) se presenta, con sus estudios, y su supuesta sanación. Se autodiagnóstico su cáncer ella misma sin otras pruebas… y, por supuesto, deja una de las máximas de las pseudociencias en su primera intervención: «no he venido a demostrar nada a nadie». Raquel Fernández en su respuesta desnuda la posición de Gascón (pese a que la señora trata de mantener su sonrisa y responde con absurdos «gracias, gracias») Para José Manuel Nieves «está todo dicho». Y así fue… pero lo más interesante estaba por llegar.
Antes, Gascón se desdice con un «yo no te he dicho que he curado a nadie» que deja perpleja incluso a su compañera de mesa para a renglón seguido decir que se ha curado fracturas en el brazo… y que cobra 80 euros por sesión de tratamiento. También vende su libro.
Tras otra pieza sobre el negocio del esoterismo Luis Balcarce afirma, a tenor de las cifras y las evidencias, que se trata de «una industria del engaño». La sra. Braojos, algo ofendida por la contundencia de las afirmaciones, trata (en una clásica «cortina de humo») de llevar el tema al argumento económico: no le va tan bien como informa en su generalización el programa. Se escabulle de la pregunta sobre el número de trabajadores, pero Balcarce vuelve a la carga con un «se creen su propia mentira». Braojos replica sin argumentos, apoyándose en una clásica falacia «ad ignorantiam».
«Quedar expuestas»
Acto III: Desenlace
Y llega un momento «cumbre» (1h47m45s en el vídeo): una llamada de una espectadora desde Tenerife. María del Carmen, con 64 años, y un cáncer desde hace tres, hace que la señora Gascón tuerza su gesto forzado de «sonrisa». El choque con la realidad es brutal y emocionante, y no añadimos nada más: les recomendamos encarecidamente que vean este fragmento concreto, que llega justo antes de un «time out» que por los comentarios posteriores parece que fue muy movido. A la vuelta, la cerrazón de la sra. Gascón le lleva a replicar usando su propia experiencia, sesgada y subjetiva… una vez más.
No imagina la sra. Gascón que la encerrona (no sabemos si preparada o no) concluye con la aparición de Fernando Blanco, padre de una niña con una enfermedad rara que recurrió varias veces en su desesperación a curanderos que afirmaron ser capaces de sanarla. La estafa en esos momentos se hizo visible para él incluso dentro de su inmenso sufrimiento.
La reacción de Toñi Moreno ante la fotografía de la niña es tremenda (como se ve en las imágenes): en ese momento recuerda haber entrevistado antes a este padre. Y es que en su lucha contra la tricotiodistrofia de su hija Fernando ha recorrido cielo y tierra, incluyendo platós de televisión, para recaudar apoyo y ayuda que, como él cuenta, fueron a parar en varios casos a manos de estafadores desaprensivos. Aún así, el sr. Blanco se sigue aferrando a cualquier cosa (como explica señalando sus collares), por lo que, por desgracia, podría seguirá siendo víctima de estafas, a pesar de que afirma con rotundidad «a mi hija la está curando la ciencia».
El resto, con abucheos del público asistente incluidos, son retortijones viscerales de dos personas que por efecto de la contundente realidad y de no contar con argumentos de debate (sino creencias, sesgos, subjetividades, etc.) quedaron expuestas ante alrededor de 481.000 espectadores .
Eso si, a Montserrat Gascón… todo esto le da igual porque su sesgo cognitivo es del tamaño que ella misma indica:
– FIN –
PD. Dedicado a Nadia, la hija de Fernando Blanco y a la lucha de su padre. Que la pseudociencias y los charlatanes no la frenen nunca más.
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