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Fecha: 08.08.2009 Lugar: Isla de Epi, Vanuatu (Oceáno Pacífico) Víctima: Silvia Fink Solís

Esta es una rocambolesca historia, que tiene a Silvia Fink como una de sus víctimas. Pero vayamos por partes:
A mediados de 1996, Jim Humble, un ingeniero de minas norteamericano estaba trabajando en la República Coop. de Guyana. A pesar de los peligros lógicos de salud que entrañaba la zona donde estaba, no llevó medicación alguna contra la malaria, p.ej. En un momento dado, dos de sus compañeros (supuestamente) fueron infectados por mosquitos portadores de esta enfermedad y empezaron a notar sus síntomas. Humble lo que si había llevado a la expedición fueron algunas botellas de un producto basado en el agua oxigenada (Peróxido de Hidrógeno o H₂O₂ diluido en agua) con un pequeño añadido de Cloruro Sódico (sal común) para purificar agua. Dió a sus compañeros una dosis que entendió razonable del producto mezclada con agua. Al parecer, cuatro horas después, ambos compañeros estaban reestablecidos.

Jim Humble y sus seguidores resumen así su historia. Pero investigando un poco más, encontramos más datos:
• Conoció las supuestas “propiedades curativas” del agua oxigenada gracias a que un amigo la usaba en pequeñas dosis para sus gallinas y perros para que estuvieran más saludables.
• Algunas personas le habían comentado que podría usar el agua oxigenada para purificar agua, ya que al mezclarlas, de la primera se libera oxígeno. Sin embargo, como ha declarado la autoridad competente en EE.UU., siempre es mejor usar pastillas potabilizadoras comerciales, y no añadidos químicos que pueden tener efectos adversos ¹⁾
• El diagnóstico de malaria lo realiza él mismo según síntomas mostrados. Tampoco cuenta en qué momento desde el primer síntoma administró la “cura”, por lo que el placebo pudo actuar en una fase final de los síntomas.
• La malaria no desaparece “por que sí”, ya que puede quedar latente en el individuo. Además hay varios tipos con procesos y duraciones diferentes. Por lo cual, no se puede concluir que fue el paludismo lo que afectó a los trabajadores.
• En vista de su “éxito” curativo, corrió a vender el supuesto remedio en la zona (su expedición se iba a prolongar unos meses) Pronto el Ministerio de Salud de Guyana lo llamó a capítulo y le arrestó. Le liberaron con el compromiso de que no volvería a venderlo y se quedó con sus productos en un almacén.²⁾
• Humble volvió unos meses después a Guyana, pese a haber perdido lo invertido en productos, con otra expedición minera. Esta vez, casualmente, Humble fue descuidado y le picaron los mosquitos. Contrajo la malaria. Según dice, en el hospital recibió la medicina necesaria para esta enfermedad, pero no la tomó. En su lugar, inisistimos, según su versión, bebió de su producto. Supuestamente su producto le curó. La duda es más que razonable: si tomó las medicinas o no.
• De vuelta en EE.UU., se mudó y trasladó el laboratorio donde fabricaba su remedio. Intentó entonces venderlo en África. Con urgencias, ya que no tenía dinero y apenas tenía el subsidio del paro. Algunas botellas llegaron a Tanzania. Algunos pacientes supuestamente se curaban, y otros no (de nuevo faltó un estudió detallado de síntomas, fase, etc.)
• Tratando de aminorar costes, busca otro modo de obtener lo que piensa que es la clave del producto. Así, en 2001, crea y nombra a su producto, compuesto de agua destilada y un 28% de Clorito de Sodio (NaClO₂), como “Miracle Mineral Supplement” (suplemento milagroso mineral), más conocido por sus siglas “MMS”. Según Humble, 8 veces más “curativo” que el anterior. El NaClO₂, igual que muchos agentes oxidantes, puede resultar explosivo y debe mantenerse protegido de la contaminación accidental de otros materiales orgánicos.
• El “protocolo” de Humble para su “correcto uso” dice que el MMS se debe mezclar con un ácido (normalmente ácido cítrico, fácil de obtener al estar presente en naranjas, limones, etc.) En la reacción se libera un gas, el dióxido de cloro (ClO₂), conocido en España como Clorito. Es también un explosivo inestable, al ser un potente antoxidante, tóxico en dosis no muy altas. Se usa para blanquear papel, ropa, etc. Para Humble es la clave de su invento, y lo que realmente cura al “oxidar solo la enfermedad” en el cuerpo, respetandolo tanto a él como a la flora bacteriana, etc.
• Como es lógico cuando alguien utiliza un tóxico, tras su ingesta aparecen síntomas de la intoxicación. Un gramo es suficiente para experimentar nauseas, vómitos, etc. Y si la persona que lo toma tiene déficit de la enzima Glucosa-6-fosfato deshidrogenasa³⁾, su sangre se queda casi de inmediato sin glóbulos rojos que lleven el oxígeno a las células⁴⁾. Jim Humble dice que esos síntomas (como hacen otros charlatanes milagreros) son parte del proceso de curación.
• Humble trató de implicar a Cruz Roja en sus tejemanejes, cosa que lógicamente la organización sanitaria internacional no tardó en desmentir⁵⁾.

En resumidas cuentas, Jim Humble fomentó (y fomenta) el uso de un producto tóxico alegando que es un curativo, no solo para malaria, sino para cancer, SIDA, etc. etc. Y se nombrado a si mismo arzobispo de “Genesis II”, su propia “iglesia para la salud curación”. Afortunadamente las autoridades sanitarias reaccionaron en muchos países. Aunque cuando uno está en medio del Pacífico… no hay autoridades ni médicos cerca. Como le sucedió a Silvia Fink.

Navegaba el yate de Doug Nash (por aquel entonces 77 años) evitando la época de ciclones por el Pacífico, junto a su pareja, Silvia, una mexicana de 56 años de edad. Cinco años de romance, y navegando juntos por zonas paradisiacas. Llegaron a la isla de Epi, dentro de la República de Vanuatu⁶⁾ Alguien les había comentado que era zona de predominancia de la malaria, por lo que Silvia decidió “prevenir”.

Su error, a la postre fatal, fue confiar en otros navegantes que le hablaron de la MMS. Así, la mañana del 8 de Agosto de 2009, Silvia ingirió, según el “protocolo” de Humble, la mezcla de MMS con un cítrico como ácido como prevención del paludismo. En tan solo quince minutos empezó a experimentar los síntomas de la intoxicación por ClO₂. Diarréa, vómitos… Los síntomas fueron a peor, con terribles dolores abdominales, renales. Pero en las indicaciones del “kit” de MMS decía claramente que esos síntomas eran normales (tal como postulaba Humble) y que podían aparecer tras la ingesta. E hicieron caso a las indicaciones.

Cuando Doug quiso reaccionar era demasiado tarde. Sus atenciones con Silvia durante ese día de tortura para ella no estaban sirviendo de nada, y Silvia empezó a desfallecer. Hasta que entró en coma. Doug consiguió ayuda, pero ni sus esfuerzos aplicando maniobras de CPR, ni el oxígeno que le intentaron hacer respirar, ni una inyección de adrenalina lograron nada. Tras una hora intentando revivirla, hubo que dejarlo y declarar el fallecimiento a las 9pm., 12 horas después de administrarse la MMS.

La vida de Doug Nash cambió en un solo día. Ahora intenta vender su yate y olvidar esta tragedia sucedida tan lejos de casa. Los restos incinerados de Silvia reposan en su México natal. La autópsia⁷⁾, realizada en Vanuatu, no condujo a una condena de la MMS, al no existir leyes al respecto en esa república. Sin embargo si dice claramente que el nivel de metahemoglobina era significativamente alto, siendo consistentes con una metahemoglobemia⁸⁾ como posible causa de la muerte. Muchos de los casos de este proceso son causados por exposición a sustancias como el ClO₂.

En España, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, prohibió expresamente el 14 de mayo de 2010 la MMS⁹⁾, tras las alertas lanzadas en otros países anteriormente, como Canadá, Reino Unido o EE.UU (donde la FDA declara que la proporción de ClO₂ presente en la MMS es similar a la lejía, con sus efectos tóxicos)

A pesar de esta prohibición, hay “elementos” dispersos que intentan promocionar la MMS en nuestro país. Por un lado, tenemos al alemán Andreas Ludwig Kalcker, capaz de decir barbaridades de este calibre:

Este gas (ClO₂) es el que genera el potente efecto desinfectante interior, que mata a todos los agentes patógenos de manera selectiva que se encuentran en el cuerpo; pero discriminando las células y bacterias sanas que tenemos. Y esto lo hace por el diferencial del PH corporal.

No es de extrañar que a finales de octubre de 2012 fuese detenido tras proclamar las “virtudes” de la MMS en una conferencia en Ibiza y, junto a otras dos personas, haber empezado a vender MMS entre su público¹⁰⁾ Poco después salió en libertad y a día de hoy no hay sentencia al respecto.

En su defensa (reclamando su libertad), y la de la MMS aparecieron varias personas. Josep Pàmies, agricultor y defensor a ultranza de la legalización de este producto tóxico y dañino. Teresa Forcades, médico, teóloga y monja de la Orden de San Benito, habitual en los últimos tiempos de charlas y congresos donde le dejan decir sus disparates. El desaparecido director de cine Bigas Luna, que falleció poco después de una leucemia. Y otros médicos y defensores de la “medicina natural”, haciendo gala de una gran contradicción con sus pretendidos principios (no es muy habitual el ClO₂ en la naturaleza)

(2014/08/08) En plena ebullición de Ébola, páginas como ésta defienden de forma irresponsable la MMS para combatir este peligroso virus. Esperemos que las autoridades actuen con contundencia.
(2015/01/04) Al menos 10 envenenados solo en Australia por usar MMS. El gobierno australiano dice de Jim Humble (que “es un peligro para la sociedad australiana”. En noviembre de 2014 le sucedió algo similar a lo de Josep Pàmies en Salamanca, se le negaron en Monash instalaciones municipales para difundir sus disparates. Fuente: Herald Sun.
(2016/07/17) José Ramón Alonso escribe en su blog sobre el tóxico MMS http://jralonso.es/2016/07/17/mms/

— Isidoro J. Martínez Vélez 2014/02/09 22:32
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