Por la extensión y lo oportuno del tema, he optado por opinar aquí sobre lo tratado en el artículo «Manual de NO actuación cuando interactuamos con alguien que piensa diferente» publicado ayer en Naukas por Luis Quevedo, sin centrarme específicamente en él y sin personalizar en nadie concreto lo argumentado (salvo alguna cosa)
En los últimos tiempos observo que varias voces se levantan contra lo que denominan «pseudoescepticismo». En sus alegatos expresan que algunas opiniones escépticas van «más allá» de la duda y se atreven a afirmar cosas, calificando esas afirmaciones poco menos que de exacerbadas. Yendo más allá, se las califica en ocasiones, a modo de desprecio, de «cientificistas».
He llegado a leer que Christopher Hitchens era «pseudoescéptico»… ¡¡¡hasta dónde llega la inventiva de los charlatanes para tratar de desacreditar a quién les expone públicamente!!! Claro que se sienten mal al ser expuestos. Es para que lo estén consigo mismos, y obren en consecuencia cambiando su actitud y discurso falaz.